… Por la mañana se nos dijo que podíamos escribir. Todavía una vez, digo yo, pues sé perfectamente que ésta será la última. Tú sabes que yo siempre he venido escribiendo a dos personas, a dos mujeres, a la «otra» y a ti. Estaba muy alejado de ti y Carlota, en estos últimos años, estaba más cerca de mí. No vamos ahora a remover todo esto hablando una vez más de cómo pudo pasar y por qué tuvo que ocurrir. Pero hoy que el destino nos coloca ante la elección, al no poder escribir más que a una persona, mi carta va a ti, que hace seis años que eres mi mujer.