Jué quedando poco a poco;
Ya me tenÃan medio loco
La pobreza y los ratones.
Sólo una manta peluda
Era cuanto me quedaba
La habÃa agenciao a la tabla
Y ella me tapaba el bulto;
Yaguané que alli ganaba
No salÃa... ni con indulto.
Y pa mejor hasta el moro
Se me jué de entre las manos;
No soy lerdo... pero, hermano,
Vino el Comendante un dÃa
Diciendo que lo querÃa
-Pa enseñarle a comer grano.-
Afigúrese cualquiera
La suerte de este su amigo,
A pie y mostrando el umbligo,
Estropiao, pobre y desnudo;
Ni por castigo se pudo
Hacerse más mal conmigo.
Ansà pasaron los meses,
Y vino el año siguiente,