La psicología del dinero
La psicología del dinero El crecimiento exponencial es lento al principio y brutal al final. Por eso muchos se desesperan en la etapa inicial, abandonan demasiado pronto o buscan atajos que terminan saliendo caros. El secreto de quienes acumulan grandes fortunas no siempre está en su genialidad, sino en su capacidad para mantener sus inversiones funcionando por décadas sin interrumpir el proceso.
En este sentido, la constancia supera a la brillantez. Es más importante invertir de manera razonable y constante durante mucho tiempo que hacerlo de forma espectacular y esporádica. El tiempo es el activo más poderoso en las finanzas, pero solo recompensa a quien no lo traiciona con impaciencia.
No hace falta ser un genio para hacerse rico. Hace falta empezar temprano, mantenerte firme y resistir la tentación de saltar de una estrategia a otra buscando resultados inmediatos. El interés compuesto es una ley natural que premia a quien respeta su ritmo.
Ganar dinero requiere audacia. Conservarlo requiere humildad, autocontrol y conciencia del riesgo. Muchas personas logran amasar pequeñas o grandes fortunas, pero pocas las mantienen. No por falta de inteligencia, sino por exceso de confianza, codicia o necesidad de demostrar su éxito al mundo.
