Hacía unas tres semanas que estábamos en el frente, cuando llegó a Alcubierre un contingente de veinte o treinta hombres enviados desde Inglaterra por el ILP[7], y como se decidió que los ingleses estuviéramos juntos en este frente, a William y a mí nos llevaron donde ellos. Nuestra nueva posición estaba situada en Monte Oscuro, varios kilómetros hacia el oeste y a la vista de Zaragoza.