La fierecilla domada

ESCENA II

Una alcoba en el palacio del noble.

(SLY, vestido con una rica bata, está rodeado de criados. Unos tienen en sus manos vestidos suntuosos; otros, aljofaina, jarro y demás neceseres para lavarse. Entra también el noble, pero modestamente vestido.)

SLY:

Por el amor de Dios, dadme un jarrillo de cerveza.

PRIMER CRIADO:

¿No le agradaría a Vuestra Señoría una copa de vino de Canarias?

SEGUNDO CRIADO:

¿Y no probaría Vuestra Excelencia estas exquisitas frutas en dulce?

TERCER CRIADO:

¿Qué traje desea Vuestra Honor ponerse hoy?

SLY:

Yo soy Cristóbal Sly. No me hartéis, pues, con tanta «Señoría» y «Excelencia». En cuanto al vino de Canarias, jamás lo he catado; y si queréis darme algo preparado, que sea buey bien ahumado. No me preguntéis tampoco qué traje quiero ponerme, pues no tengo más justillos que espaldas, más calzas que piernas, ni más zapatos que pies. Es más, con frecuencia me ocurre tener más pies que zapatos. O tales zapatos que los dedos asomen por los agujeros del cuero.

LORD:

eXTReMe Tracker