En un momento de notable crisis espiritual, Tolstói, basándose en la experiencia real de un viaje que emprendiera dos años antes, escribe «La tormenta de nieve» (1856). Con una muy fuerte carga metafÃsica, nos describe, al amparo de las condiciones externas, un sueño y la presencia de la muerte, el punto de inflexión entre el conformismo y el coraje. Memorable y entrañablemente poética, esta narración a medio camino entre la alegorÃa y el diario nos habla de la toma de conciencia de uno mismo y de sus retos.