Hace nueve semanas que no funciona — respondió Vázquez.
—¡Nueve semanas! ¿ Qué significa esto? ¿Y sus dos compañeros?
—Felipe y Moriz no existen. Veintiún dÃas después de la partida del Santa Fe, el faro no tenÃa más que un torrero, mi comandante.
Vázquez relató los acontecimientos que habÃa sido teatro la Isla de los Estados. Una banda de piratas, bajo las órdenes de un tal Kongre, hacÃa varios años que estaba instalada en la bahÃa de Elgor, atrayendo los navÃos hacia los arrecifes del cabo San Juan, recogiendo los restos de los naufragios y asesinando a los supervivientes. Nadie sospechó su presencia durante el tiempo que duró la construcción del faro, porque los bandidos se habÃan refugiado en el cabo San Bartolomé, extremo occidental de la isla. Cuando partió el Santa Fe y los torreros quedaron solos, la banda Kongre remontó la bahÃa de Elgor en una goleta que por casualidad cayó en su poder.