Los Miserables - Parte 3

Capítulo 11 Las dos sillas de Marius frente a frente

De súbito, la lejana y melancólica vibración de una campana hizo temblar los vidrios. Daban las seis en Saint-Médard.

Jondrette marcó cada campanada con un movimiento de cabeza. Cuando dio la sexta, despabiló la vela con los dedos. Después se puso a andar por el cuarto, escuchó en el corredor, se paseó y escuchó nuevamente.

- ¡Con tal que venga! -masculló.

Y se volvió a sentar.

Apenas se había sentado, se abrió la puerta.

La Jondrette la había abierto, y permanecía en el corredor, haciendo una horrible mueca amable, iluminada de abajo arriba por uno de los agujeros del farol.

- Entrad, mi bienhechor -dijo Jondrette, levantándose precipitadamente.

Apareció en la puerta el señor Blanco. Tenía una expresión de serenidad que lo hacía singularmente venerable. Puso sobre la mesa cuatro luises, y dijo:

- Señor Fabontou, aquí tenéis para el alquiler y para vuestras primeras necesidades. Después ya veremos.

- Dios os lo pague, mi generoso bienhechor -dijo Jondrette.

eXTReMe Tracker