Los trabajos y los días

Versátil es el pensamiento de Zeus egidíforo (154), difícil de entender por los hombres rendidos a la Muerte. Mas, si labrases tarde, esta puede ser la solución: cuando el cuco canta, en las ramas de la encina, por vez primera, y deleita a los mortales, sobre la inacabable tierra, Zeus entonces llueva por tres días sin cesar (155), no sobrepasando el agua la pezuña del buey, ni bajando de ella (156). Así podrá igualar el labrador tardío al tempranero (157). Conserva bien en tu mente todos mis consejos; y que no te sorprenda ni el advenir de la primavera blanca, ni el tiempo de las lluvias.

3. INVIERNO

En la estación invernal (158), cuando el frío aleja al hombre de trabajos (159), pasa de largo ante el asiento de la fragua y la soleada tertulia. Entonces, un varón emprendedor puede hacer grandes mejoras en su casa. Que la desesperanza de crudo invierno no te coja con pobreza, y con flaca mano tengas que oprimir hinchado pie (160).

El hombre inactivo que se aferra a una vana esperanza, mendigo de sustento, constantemente increpa a su corazón con maldiciones (161). Esperanza nada buena acompaña al varón menesteroso, que se está sentado en la tertulia, cuando los medios de vida no le llegan. Avisa a tus sirvientes, cuando aún esté mediado el estío: "No siempre será verano, haceos cabañas" (162).

eXTReMe Tracker