Reseña de Los rurales están aquÃ
EN el cuartel de la Décima CompañÃa de Rurales, se recibió el aviso de lo que estaba sucediendo en Corn Corner la tarde de un dÃa de finales de agosto, cuando en la oficina se encontraba únicamente el cabo Calvin Woodbury. Este imaginaba que a ningún cristiano decente se le ocurrirÃa atravesar la explanada delantera a semejante hora, cuando el sol descargaba toneladas de fuego sobre todas las cosas, asà que se habÃa despojado de la camisa y lucÃa su potente tórax en tanto que se afanaba en redactar un informe.