Los Lanzallamas

51 El cronista de esta historia encuentra absurda la creencia de Elsa respecto al enamoramiento de Erdosain por la prostituta. Elsa no conoció jamás a su esposo. Erdosain ―y utilizo aquí uno de sus términos― se “regocijaba inmensamente” cuando podía originar situaciones grotescas que hubieran escandalizado a sus prójimos, de conocerlas. Refiriéndose al episodio de la prostituta, Erdosain explicó: “Elsa se equivocaba groseramente suponiendo que yo estaba enamorado de esa mujer. Sentía por ella una lástima enorme, que degeneró en deseo cuando nuestra situación se convirtió en anormal. Con un poco más de dominio de mí mismo, ese acto, aparentemente innoble, hubiera sido puramente cristiano. ¡Pero es difícil ser puro!”










eXTReMe Tracker