Entran PORCIA, NERISA, LORENZO, YÉSICA y [BALTASAR], criado de Porcia.
LORENZO
Señora, lo digo en vuestra presencia:
tenéis un sentido noble y verdadero
de la divina amistad, y lo habéis demostrado
aceptando la ausencia de vuestro esposo.
Mas si supierais a quién hacéis tal honor,
a qué leal caballero socorréis,
a qué buen amigo de vuestro esposo mi señor,
sé que estarÃais más orgullosa
de lo que os hace sentir vuestra bondad.
PORCIA
Jamás me ha pesado hacer el bien,
y menos ahora; pues, entre amigos
que pasan el tiempo en compañÃa,
cuyo ánimo comparte el mismo afecto,
seguro que ha de haber idéntica armonÃa
de rasgos, hábitos y espÃritu.
Por eso creo que este Antonio,
este amigo entrañable de mi dueño,
por fuerza ha de parecérsele. Siendo asÃ,
¡qué precio tan bajo he pagado
por rescatar al retrato de mi alma
del dominio infernal de la crueldad!
Pero esto me acerca demasiado
al elogio de mà misma, conque a otra cosa.