POR eso lo hice. ¡Fue tan fácil! Al fin y al cabo son mis primos. Patricio y yo nos hemos criado juntos. ¿Sabes cuándo fue eso? Hace por lo menos cuarenta años. Pero, no creas, ¿eh? No nos hemos olvidado nunca. ¿Recuerdas aquel jarrón de China que tenemos en el vestÃbulo? Pues me lo regaló Patricio el dÃa que yo me casé, ?la voz de tÃa Patty se agitó?. ¡Qué dÃas más felices, Ini! ?sacudió la cabeza?. Pero ya pasaron. Todo pasa. Todo llega y todo pasa. Como te iba diciendo... ¿Qué te decÃa? Ah, sÃ... Ini la oÃa apenas. ¡HabÃa tanta gente por la estación! Un maletero andaba buscando maletas que portar desde la entrada de la estación, a la mole que era el tren estacionado en el andén doce. TÃa Patty, como si no viera ni oyera nada, seguÃa diciendo, sin soltar el maletÃn que sujetaba firmemente en una mano. ?Ah, sÃ. Te decÃa que por eso les escribÃ. Respondieron en seguida...