Reseña de Una insignia en el pecho
?¡Tú y yo hemos terminado, Red! Los ojos atónitos y verdosos del hombre se entrecerraron al oír aquella rotunda afirmación de la encantadora Sara Corcona. ?¿Por qué? ¿Se puede saber a qué obedece esa decisión, nena? Sara se volvió hacia él y le dirigió una mirada cargada de odio. ?Eres un cínico y un indeseable. Me he enterado que perteneces a la banda de Henry Pollock. Esto es suficiente para que te desprecie y no quiera verte jamás. ?Sabes mucho ya, nena ?sonrió Red con un gesto maligno en su mirada.