Reseña de Malempin
Con Malempin, Simenon nos ofrece una nueva y humanĂsima novela que nos recuerda por su intensidad y su dramatismo profundo, casi subterráneo, las mejores páginas de Georges Duhamel. Sus dotes de narrador aparecen en Malempin desarrolladas de forma magistral. Todo se dice brevemente, en voz baja; las cosas, más que explicadas, son insinuadas. A travĂ©s de este dibujo literario la figura del protagonista se acusa segura y emotiva.El Doctor Malempin tiene a su pequeño hijo Bilot enfermo, gravĂsimo, de difteria. Malempin recuerda las palabras de su colega el Dr. Morin, a quien ha consultado: «? los sĂntomas más graves sobrevienen habitualmente alrededor del dĂ©cimo dĂa, brutalmente, trayendo la muerte brusca?». Durante estos diez dĂas, en que se debate la existencia de su hijo, que «tiene la expresiĂłn de sonreĂr a los ángeles», Malempin recuerda su infancia, las muertes misteriosas habidas en su familia, el fracaso, en fin, de su matrimonio. Falto de amor, frĂo?El Doctor Malempin recuerda el pasado cuando teme perder lo que más ama del presente.